Que Soyapango estuviera año con año de las últimas tres décadas entre los «primeros lugares» de la nefasta lista de los municipios más peligrosos del país era visto como algo «normal» para los analistas y para las antiguas autoridades de Seguridad Pública.
Y no era para menos, en ese municipio se asesinaba casi a diario, los datos de la Policía Nacional Civil registran para el año 2005, por ejemplo, que hubo 242 homicidios lo que lo hizo terminar el año con una tasa de 93.1 homicidios por cada 100,000 habitantes.
Ni siquiera en los años de «la tregua» entre pandillas y avalada por el gobierno de Mauricio Funes la tasa de criminalidad fue reducida como lo han logrado las actuales autoridades. En 2014 por ejemplo la tasa fue de 50 homicidios por cada 100,000 habitantes.
Y aunque el Gobierno del prófugo Sánchez Cerén lo ubicó entre los municipios priorizados de su plan «El Salvador Seguro», la presencia y control de las pandillas, que el mismo gobierno de izquierda facilitó su crecimiento, no permitieron sacarlo de los primeros cuatro puestos de los municipios más peligrosos del país, por el contrario en 2016 hubo 220 muertes violentas, en 2015 se registraron 175 homicidios y en el año 2018 las autoridades de Medicina Legal registraron 97 homicidios.
Según un estudio de la ONG, Fundaungo, «Entre 2012 y 2018, las personas jóvenes representaron el 52.4 % del total de homicidios a nivel nacional. Además, la tasa de homicidios de jóvenes en 2018 (87.0) es mayor a la tasa nacional (50.4)». De ahí que, en Soyapango, la mayoría de las víctimas a lo largo de décadas han sido jóvenes y asesinados con arma de fuego [70%].
Y según ese informe, los homicidios en perjuicio de hombres jóvenes representaron tasa de 159.4 por cada 100,00 habitantes, siendo «los que más sufren este tipo de delito en relación con las mujeres jóvenes (tasa de 15.2)», esto a escala nacional.
El drástico cambio hacia otro Soyapango
Desde junio de 2019, escuchar de homicidios ha sido poco frecuente y la semana anterior el presidente de la República, Nayib Bukele, en el marco de la inauguración de un CUBO afirmó que «Los jóvenes ahora tienen más oportunidades y libertad de salir y divertirse, pueden ir al CUBO a bailar o cantar rap».
Y agregó que «En Soyapango, la tasa de homicidios era de 73 por cada 100,000 habitantes. Pero en 2022 fue de 2 por cada 100,00 habitantes».
En los últimos meses las autoridades reforzaron la presencia de policías y soldados y establecieron un cerco que ha permitido la detención de más de 700 pandilleros y colaboradores en colonias como la San José, la 22 de Abril o la Guayacán y Montes de San Bartolo.
Y esto es lo que ha generado una nueva atmósfera en el populoso municipio a donde trabajadores y estudiantes ahora se desplazan con más libertad y seguridad.
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